LA CRUZ DE BORGOÑA: ORIGEN DE UN SÍMBOLO IMPERIAL
Felipe I provenía de Bélgica, y era duque de Borgoña. El estandarte de la Casa de Borgoña era el Aspa de San Andrés (de ahí que también sea llamada Cruz de Borgoña), por lo que, al casarse con la reina de Castilla, el símbolo pasó a tener relación con la monarquía española.
El hijo de Juana y Felipe, Carlos, hereda por parte de su madre Castilla, Aragón y Navarra, y por parte de su padre los dominios europeos de los Habsburgo y de la Casa de Borgoña.
De este modo, Carlos I de España, que se convertiría en el emperador Carlos V del Sacro Imperio Romano Germánico, se convierte en soberano de la mayor parte de Europa y en el hombre más poderoso del continente.
Además del inmenso territorio heredado, Carlos V hereda también los símbolos de cada linaje, tanto por parte de su madre y de sus abuelos (los Reyes Católicos) como de su padre. De modo que incorpora la Cruz de Borgoña y la convierte en estandarte de buena parte de sus ejércitos.
Esto hizo que la Cruz de Borgoña se convirtiese en un símbolo característico de los ejércitos del rey. En aquella época no existían las banderas nacionales que representaban a un pueblo o un estado soberano, sino estandartes reales que representaban a una dinastía y a los territorios que ésta controlaba.
De modo que la Cruz de Borgoña no era en tiempos de Carlos I o Felipe II la bandera nacional de España, sino que era un símbolo representativo de la Monarquía Imperial Habsburgo de la cual formaba parte España y que sobre todo identificaba a los ejércitos del Rey.
De ahí que se relacione tanto al Aspa de San Andrés con los tercios. Y es que la Cruz de Borgoña fue el emblema representativo de la infantería española durante casi 4 siglos, siendo la primera vez que esta bandera ondeó en la batalla de Pavía de 1525.
Los tercios estaban compuestos de soldados tanto españoles como extranjeros, súbditos del monarca de cada momento.
Sin embargo, el hecho de que los reyes de la Monarquía Habsburgo desde Felipe II naciesen todos en España y a que los dominios europeos comenzaron a tener otros soberanos, el Aspa de San Andrés se identificaba con España.
La llegada de la Casa de Borbón tras la Guerra de Sucesión incorporó la bandera de su dinastía, pero la Cruz de Borgoña siguió teniendo protagonismo en el ejército, y empezó a ser utilizada también por las distintas ramas de los Borbones que reinaban en Francia o Italia.
Los tercios estaban compuestos de soldados tanto españoles como extranjeros, súbditos del monarca de cada momento.
Sin embargo, el hecho de que los reyes de la Monarquía Habsburgo desde Felipe II naciesen todos en España y a que los dominios europeos comenzaron a tener otros soberanos, el Aspa de San Andrés se identificaba con España.
La llegada de la Casa de Borbón tras la Guerra de Sucesión incorporó la bandera de su dinastía, pero la Cruz de Borgoña siguió teniendo protagonismo en el ejército, y empezó a ser utilizada también por las distintas ramas de los Borbones que reinaban en Francia o Italia.
La Cruz de Borgoña es frecuentemente relacionada con el carlismo, pero lo cierto es que es más complejo de lo se suele apuntar, y su identificación con el carlismo es posterior a las guerras carlistas que se libraron en el siglo XIX.
En la Primera Guerra Carlista, por ejemplo, la Cruz de Borgoña no era el estandarte de las tropas carlistas, sino de las isabelinas, ya que era un emblema del ejército regular, que estaba al servicio de la reina.
Aunque unidades carlistas utilizaron la borgoñesa (igual que las tropas isabelinas), la identificación de este símbolo con el tradicionalismo es posterior. Es en 1935 cuando Manuel Fal Conde, jefe delegado de la Comunión Tradicionalista, la incorpora como símbolo del Requeté.
En la Primera Guerra Carlista, por ejemplo, la Cruz de Borgoña no era el estandarte de las tropas carlistas, sino de las isabelinas, ya que era un emblema del ejército regular, que estaba al servicio de la reina.
Aunque unidades carlistas utilizaron la borgoñesa (igual que las tropas isabelinas), la identificación de este símbolo con el tradicionalismo es posterior. Es en 1935 cuando Manuel Fal Conde, jefe delegado de la Comunión Tradicionalista, la incorpora como símbolo del Requeté.
El Requeté fue una organización paramilitar carlista creada a principios del siglo XX y que tuvo una participación destacada en la Guerra Civil española del lado del bando sublevado o nacional.
Al incorporar la Cruz de Borgoña como uno de sus símbolos, el Aspa de San Andrés era identificada frecuentemente con el carlismo, que se reivindicaba heredero de la Monarquía tradicional que presuntamente había representado la bandera elegida.
En la actualidad, también es muy común que la Cruz de Borgoña sea vista como un símbolo de unión entre España y los pueblos hispanoamericanos, ya que este estandarte es representativo de la Monarquía Imperial que conquistó e hispanizó América.
Un símbolo, proveniente del extranjero, que los siglos han convertido en uno de nuestros símbolos como país y como civilización hispana. Le encuentres el significado que le encuentres, y la veas donde la veas, la Cruz de Borgoña siempre la identificarás con España.
Un símbolo, proveniente del extranjero, que los siglos han convertido en uno de nuestros símbolos como país y como civilización hispana. Le encuentres el significado que le encuentres, y la veas donde la veas, la Cruz de Borgoña siempre la identificarás con España.
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